¿Espejismos o realidades?

Pasa el tiempo y nuevas vidas que envejecen nuestra historia... Es a partir de las experiencias, tanto nuestras como de los nuestros, que crecemos y nos definimos. Y aquí la intención de estos espejismos... estas formas de ver. Por medio de un relato quizás desvirtuado, expresar algo, con la esperanza de que quienes lean, lo encuentren de su mayor utilidad posible.

(Los textos se ubican en orden inverso de publicación. Es decir, el más reciente primero)

Recuerdos latentes


Simplemente cuando el pasado azota en forma de hipótesis, a veces el problema se soluciona cambiando la perspectiva. Tenganlo en mente y espero que les sirva la táctica. Abrazo.


Sentado bajo las sombras excava en el pasado,
pensando en lo que controla rellena sus retazos.
Pero un detalle se le escapa... una memoria abandonada,
un silbido que te atrapa... una mirada descifrada

El anhelo prometido busca siempre su camino
La navaja del olvido que hace poco está sin filo...

En su fría calidez se refugia unos instantes
disfrutando el entremés ellos quedan tan campantes
No se quiere exponer al desvelo que era ansiado,
el que habla sin convencer del cariño recordado.

Las navajas del suplicio ha guardado en sus bolsillos
Con un trago y sacrificio que no puede ahogar sus gritos...


Sin un muro que lo ampare del sentir ese recuerdo,
se entrega sin que lo llame a su humilde instrumento...
Sin escape a su abrupto... pero así prefiere estar,
para buscar luego un futuro, y por ella progresar

El trago amargo desteñido yace ahora con espanto
Ni dormido ni sumido... el temor ya no es tanto.
Arrancándose su piel, prometiéndose consigo:
“Aunque no latas al caer, en mi mente estás conmigo.
De tí nada me separa, te recuerdo: por tí existo
y aunque el mar te llevara, estarás cuando lo necesito”

Lágrimas negras


Soy muy ambiguo y no dejaré de reconocerlo. Escribo los textos más tristes y oscuros cuando estoy mejor y los más claros cuando necesito gritar. Pero bueno... así es la vida. Nadie dijo que fuera simple de entender mi ser. Jejeje.

Sé que le doy una interpretación al texto y es probable que le den otra. Yo lo veo como una forma de exteriorizar el dolor y como llega por métodos no usuales. A su deleite queda.



Voy buscando alguna forma de alejar este dolor
Intentando sin lograr escapar de tal horror.
Voy queriendo alcanzar aquel sueño prometido
Pero parezco fallar y en el camino perdido.

Sin que halle la manera de escapar del sufrimiento...
Esperando una condena... para su enorme lamento....
Son las lágrimas negras, que acallan el fragor
Estas lágrimas negras, que mitigan el ardor

En mi deseo me prometo llegar a un poco más
Aunque el árido camino impacte hacia atrás
Y los miedos no serán tanto como mi capricho
Que el temblor no pasará arrasando mi destino.

Es su llanto el que se ahoga y destiñe el hondo mar
El sollozo que devora como un diente mortal...
Son las lágrimas negras, que se llevan el temor
Esas lágrimas negras que nos calman del error.

Ahora un poco más tranquilo, insiste con su libertad...
Porque quiere ese destino, para él una verdad...
Por las lágrimas negras...

Deseos de superación

Previa larga, son libres de saltear.
Para empezar, me encuentro en grato momento: Para muchos de los míos (Casi todos) fue una semana por demás de buena, por lo que me alegro mucho por todos ustedes. Se les dieron las cosas bien, tal y como lo merecen. Por lo que me alegro y los felicito. Ahora, haré los dos casos más puntuales:
En primer lugar, felicito a mis amigos de Derivados que tuvieron su primer experiencia en vivo y donde van a tener otra seguramente aún mucho mejor. Así que arriba y sigan así que gusta.
Y por otro lado, en los casos más puntuales, felicito a Darkness Writer, que finalmente abrió para público en general una especie de comunidad donde se podrán compartir diferentes expresiones de arte.
Bueno, les dejo los enlaces una vez más (Los tienen a la derecha de cualquier manera)
¿Y a qué viene todo esto? Sencillo: Ellos lograron lo que lograron por superarse. Lo que es la idea de lo que viene



La vida a veces puede más. Es un pensamiento de quienes han pasado momentos crudos, pero han logrado superarlos. ¿Fue la vida la que pudo más? ¿Fue el designio el que marcaba que debía superarse la tempestad? ¿O fue la propia voluntad de estos individuos la que los llevó a más?

Las opiniones son divididas. Divididas ante un mismo hecho y un mismo resultado, porque los seres somos los distintos. Algo hay que reconocer, más allá de si el designio existe o no: Se propusieron seguir adelante y lograron crecer, de una u otra manera, sea o no lo que hubieran querido.

¿Tienen algo de especial? Nada que otro ser no pueda tener. Sólo la voluntad para seguir adelante ante complicaciones. Estos tenaces son concientes de que hay piedras en el camino y de que van a tener tropiezos. Pero están dispuestos a seguir., Por el fin que se pusieron, por su propio incentivo y por el incentivo de quienes estiman.

Los veo pasar desde aquí: A ellos y a sus huestes. Ese andar firme y temible, pero constante, seguro y cálido. Ese paso que le da a uno las ganas para seguir y olvidar, por un momento, todo lo sucedido, pero no lo que puede suceder. Ese instante en el que uno hace tanta ilusión.

El mayor respeto para quienes luchan continuamente por sus objetivos. Para ellos que forcejean para llevar sus deseos, por más simples que sean, a la realidad. Para ellos que se superan y crecen continuamente, ejemplos de vida que superan la adversidad. Y el mejor de mis deseos para quienes arremeten contra la tormenta, en busca del crecer y de la dichosa y por momentos esquiva felicidad. Porque son los que saben que mientras haya vida, hay oportunidades y van por ellas. Porque pueden más.